domingo, 28 de febrero de 2016

Día de Andalucía con Joaquín Sabina


Veníamos esta tarde, de Sanlúcar, de vuelta a Palma y sonaba la radio en el coche: acto institucional del Día de Andalucía. Entrega de medallas y de distinciones de Hijo predilecto al médico Ángel Salvatierra y al cantante Joaquín Sabina. El discurso de Sabina me ha gustado. Reconozco que hay cosas suyas que no me convencen. En general su obra se merece un aplauso. Poeta consumado, ha hecho su discurso en verso. Su introducción, en tono cómico, ya me captó la atención. Como en su trayectoria, el discurso tiene pasajes que no comparto y otros que me han encantado. Reivindicativo hacia los poderosos, polémico (defendiendo su ideología de izquierda y, al mismo tiempo, su pasión por la tauromaquia), sin traicionar su libre pensamiento y ensalzando la cultura de nuestra tierra, la del pasado y la de la actualidad. Bien traído su recuerdo, y su préstamo de versos, de Antonio Machado. Lúcida exigencia de que aquí cabemos todos, pensemos lo que pensemos. Y magnifica mención a los puentes que deben estar siempre uniendo a las gentes y tierras de España, en estos tiempos de tribus y separaciones. Merece la pena recordarlo.

jueves, 25 de febrero de 2016

Pactos y no pactos


Esta tarde, mientras estaba en la cocina, sonaba de fondo la voz de Belén Esteban en la televisión. La voz en grito, pues es la costumbre de esta señora y los demás "contertulios" de los programas de Telecinco donde participan (casi a todas horas del día, por cierto). El griterío es lo normal, ya que de alguna forma tienen que concitar la atención de la gente, pues de argumentos no andan precisamente muy sobrados. Pues bien, cuando alzó la voz la "princesa del pueblo" una sonora ovación de aprobación sonó entre el público asistente. Entonces pensé: "así está España". 

Viene esto a cuento de las negociaciones entre los diferentes partidos para conseguir pactos de gobierno, de investidura, de legislatura... o lo que sea. Mucho griterío en los medios de comunicación, incluida internet con sus "redes sociales", pero ninguna voluntad de llegar a acuerdos que consigan un gobierno mínimamente estable. 

Al alcanzar un pacto el PSOE con Ciudadanos, el resto de los (presuntos) aspirantes  a pactar a cuatro bandas (Podemos, IU y los demás) se han lanzado al cuello de los pactistas. Han llegado a sacar trapos sucios del pasado (por ejemplo, las declaraciones mutuas de los dos partidos de pacto, descalificatorias), cuando ellos también han descalificado al PSOE, con el que supuestamente querían pactar, en la misma campaña electoral pasada, e incluso después, pues las redes sociales siguieron siendo campo de batalla contra el partido de Sánchez, sin un día de tregua siquiera. ¿Qué voluntad de pactos podía ver nadie cuando te estaban atacando con saña cada hora del día, por ejemplo diciendo que el PSOE era la derecha? ¿Y qué sentido tenía querer pactar con esa "derecha disfrazada" y luego sentirse como la amante despechada en el último momento antes de la boda? Paparruchas, o mejor, griterío al estilo "Sálvame" para seguir buscando el aplauso fácil del público.

Ayer la "Secta" (la Sexta TV) lanzaba su campaña contra el PSOE y Ciudadanos, dando altavoz a los que decían que el pacto era un fracaso porque los números no sirven para conseguir el gobierno, y sin leer siquiera el contenido del pacto. Destacando tanto a Podemos, como al PP (aliados por la confluencia de intereses en este momento). Y tienen razón los que se fijan en la aritmética. Pero olvidan que los números son tercos. El PSOE (89 diputados) más Ciudadanos (40) suman 129 votos, lejos de la mayoría absoluta del Congreso (176). Pero el PSOE, más Podemos (65 diputados), más IU (2), más Compromís (4), son 160. Y tampoco se consigue esa mayoría. Así que ambas posibles coaliciones o pactos de investidura o de gobierno, estaban abocados al fracaso. Digan lo que digan. ¿O es que pensaban que los independentistas se iban a sumar sin conseguir la promesa de trocear España? Hay tantos intereses encontrados que es difícil llegar a un punto de encuentro, aunque eso fuese posible, como nos demuestra la historia. Recordemos lo que hacían los italianos tras la Segunda Guerra mundial: para evitar que el partido comunista se hiciese con el poder se aliaban partidos de muy diferente pelaje, formando distintas coaliciones de gobierno. Ese era su interés común y lo ponían por encima de todo. Y lo consiguieron, impidiendo que gobernase el PCI, llegando hasta su disolución, tras la caída del Muro de Berlín. Quienes quisieran cambiar las cosas, impidiendo que el PP volviese a formar gobierno, lo tendrían fácil buscando el interés común. Pero los intereses particulares han primado. Esto es España y no Italia.

Mucho griterío, mucha pose de dignidad atacada o de dama ofendida, pero todo fuegos artificiales. Ya se sabía que, tanto PP como Podemos, quieren nuevas elecciones, pues confían en mejorar resultados. Y no se cortan en decirlo... aunque también digan lo contrario. Como pasa en el dichoso programa donde salen (y gritan) Belén Esteban y su coro de "vips". Me temo que ese será el resultado de todo esto: fracasos en la votaciones de investidura, y en junio elecciones. El griterío, mientras tanto, seguirá, con los actores y actrices de la comedia del nuevo "Sálvame" en escena. Y los problemas de la ciudadanía olvidados en un cajón. 

miércoles, 24 de febrero de 2016

Los calcetines


Una de estas últimas tardes me senté en el sofá, tras las tareas de la cocina, para dar una reparadora cabezadita. En ese momento, y antes de coger el sueño, sonó el teléfono. Algo no tan raro. Lo cogió mi mujer y alguien preguntaría por el titular de la línea, pues me lo pasó inmediatamente. Algo me querrían vender (hay que ve lo que les gusta a los vendedores telefónicos llamar a tu casa a la hora de la siesta). Me puse al aparato y, tras preguntar por mi nombre, una amable mujer me indicó que pertenecía a la empresa XX, y que la semana siguiente estarían por Palma del Río para suministrar a los clientes locales, escogidos aleatoriamente entre los que aparecen en la guía telefónica, los famosos calcetines modelo YY, que seguro que yo debía conocer por la televisión. Le contesté, todavía entre absorto por el sopor de la sobremesa y perplejo por la interrupción de mi descanso vespertino, que no, que no sabía de tales prendas. A ella no le importó y siguió con su promoción. Me indicó que el lunes me facilitarían los famosos calcetines, eso sí, sin tener que comprarlos, "pues lo que nos importa es la publicidad, el boca boca" (frase que me dejó todavía más pasmado: ¿tendría yo que dedicarme a promocionarlos? ¿me iban a contratar como publicista?). Solo los posteriores compradores que demandaran el producto tendrían que pagar su precio: una cantidad que superaba los 40€ (43 o 45, no recuerdo). Para mí serían gratis y solo tendría que pagar los gastos de envío... valorados en 14€. "¿14 euros de gastos de envío? ¿vendrían en AVE o serían transportados por la estación espacial internacional?", pensé. No dudé más y corté a la teleoperadora con un tajante "gracias, pero no me interesa". Y terminé la conversación.

Me acordé de otras promociones donde otro señor o señora te ofrecía la famosa novela XX del afamado literato YY gratis, que recibiría en mi casa por solo los gastos de envío, que, naturalmente, ascendían a una cantidad que superaba con creces el precio normal de esa misma obra en el mercado. Vamos, una tomadura de pelo más. Como la que sufrí años atrás (o sufrimos, mejor dicho) cuando un señor, que se presentó como compañero del partido, nos ofreció las obras completas de Largo Caballero o de Fernando de lo Ríos (o quien fuese, que ya no me acuerdo), a precio muy asequible y que nos enviarían en varios lotes, a pagar por mensualidades. Solo era necesario hacer un adelanto de 1.000 pesetas, que muchos pagamos. Yo había comprado las obras completas de Julián Besterio de ese modo, y las conservo, lujosamente encuadernadas, en mi biblioteca. Picamos varios y de las obras nada más se supo, hasta que tiempo después nos llamaron por si queríamos ser parte en el juicio contra aquel señor tan vivo, que se había aprovechado de nuestra confianza. Pero como no había papeles firmados, la mayoría desistimos de meternos en  pleitos, y el pícaro se llevó la pasta sin consecuencias. 

Es, parece, normal que haya quien se aproveche de tu ingenuidad, para sacarte los cuartos, engatusándonos con promesas de regalos y otros trucos similares, haciéndonos comprar cosas que no necesitamos, ni nos sirven. Y encima hacernos creer que nos están haciendo un favor. Es lo que pensé con la oferta del "regalo" de los calcetines. "Ni que fueran los que se puso Esperanza Aguirre cuando huyó apresuradamente de un hotel de Bombay, tras un ataque terrorista". Al menos esos calcetines tendrían el valor de haber sido útiles (aunque estéticamente horrorosos) en un trance así, convirtiéndose en objeto de "valor histórico". Pero los calcetines que me hagan falta ya me los compraré yo (o mi mujer lo hará) y seguro que me salen más baratos que el  precio del transporte de los famosos. 

lunes, 22 de febrero de 2016

Nube de arena


En agosto del pasado año, entre comentarios sobre el calor, tuvimos un elemento singular en la meteorología local: la lluvia de barro. Una nube de polvo procedente de las arenas del Sáhara se había colado en el cielo sobre la península y, al mezclarse con las nubes típicas de vapor de agua, produjo precipitaciones de arena mezclada con el agua, con lo que todo apareció en el exterior cubierto de barro. 


Ayer, al levantarnos, vimos que también había nubes. Nubes extrañas, pues eran bajas y nublaban la vista en las edificaciones, dejando la parte de la atmósfera más alta al descubierto. Era como una neblina, que dejaba pasar la luz, con tono parduzco. Otra nube de polvo sahariano se había colado en nuestra tierra, según supimos después. Un manto que persiste hoy y que se espera desaparezca el miércoles con el cambio de los vientos. Ojalá sea así, pues, al no haber frentes nubosos sobre nuestras cabezas, que provocaran lluvia y ésta pudiese limpiar la atmósfera, aunque padeciésemos la momentánea lluvia de barro, el aire está turbio. Y yo, esta tarde, al sacar las fotos (donde se aprecia la nube parda y baja frente al cielo azul), hasta he sentido la sensación de "masticar arena", algo muy molesto. Confiemos en los vientos que nos traigan las esperadas lluvias y se limpie la atmósfera.

sábado, 20 de febrero de 2016

Umberto Eco


Soy poco asiduo a la literatura de ficción, prefiero el ensayo, aunque eso no impide que lea alguna novela de vez en cuando. Lo que sí me ocurre es que no leo libros de moda o bets sellers. Cuando veo que algún libro se convierte en favorito de masas, me inclino por no comprarlo, ni leerlo, de forma consciente o inconsciente. Sin embargo, tengo excepciones, por ejemplo "El código Da Vinci", de Dan Brown, que me lo compré al poco tiempo de salir al mercado. Todavía recuerdo cuando fui a la desaparecida librería Luque de la calle Cruz Conde de Córdoba y llevé el libro a la caja: el dependiente lo vio y musitó "otro Código Da Vinci" medio cantando. Sentí vergüenza al verme retratado por el librero como un esnob más. No lo leí. Ya conocía el trasfondo del libro (las leyendas templarias, lo de María Magdalena, la historia del priorato de Sión...) por revistas especializadas, así que preferí leerme más tarde los libros de Henry Lincoln, Michael Baigent y Richard Leigh, "El enigma sagrado" y "El legado mesiánico", que eran ensayos y contaban las historias originales sobre las que se había basado Brown en su, por cierto, mala (según los críticos) novela.

"El nombre de la rosa", del lingüista y pensador Umberto Eco, fue uno de eso libros, que se había convertido en éxito de ventas, y que me negué, por ello, a leer. Fui a ver la película con un amigo al cine (años después del lanzamiento de la novela, lógicamente) y me sorprendió y gustó. Me pareció una historia apasionante y sugerente, un relato de novela negra ambientado en la oscura Edad Media, con mucha carga detrás. Así que, consciente de que el cine y la novela son dos artes diferenciados y con lenguajes diferentes, me decidí a comprar el libro para descubrir otros matices y el por qué de su éxito como libro. Disfruté como no lo había hecho antes ante un relato de ficción. Me pareció un texto muy completo, muy bien escrito, magistral, repleto de ideas, y con unos personajes bien retratados y atractivos para alguien que ama la libertad, frente a las imposiciones de los poderes, sean cuales sean. Por ello adquirí más tarde las "Apostillas a El nombre de la rosa", obra en la que nos cuenta el proceso de creación y los motivos e intríngulis de la famosa obra.

Cuando se publicó la siguiente novela, "El péndulo de Foucault" también lo compré. Y lo leí con entusiasmo. Trataba temas esotéricos tan queridos por mí siempre. Me gustó, pero algo menos. No obstante, Eco nos seguía demostrando su excelente dominio del lenguaje y que en su cabeza bullían temas no habituales en la literatura famosa.

Lo mismo me pasó con la novela posterior del mismo autor, que la compré nada más salir al mercado, con cierta ansiedad por leerla. "La isla del día de antes" nos la presentaban como otra obra maestra del italiano, donde desarrollaba sus capacidades para recrear lenguajes del pasado. Una especie de divertimento con el que demostrar sus conocimientos de los idiomas a través del tiempo. Pero aquí vino el cansancio. No me enganchó. Y no la terminé. Se me hizo demasiado densa y poco interesante. Con ella acabó mi interés por las obras de ficción de Umberto Eco. 

Umberto Eco es considerado uno de los intelectuales capitales del siglo XX, y con merecimiento. Por eso no lo veo como un autor para las masas. Y, de ahí, que en los últimos años su fama haya decaído. Ayer falleció y todos son elogios hoy hacia su figura. Elogios merecidos. Yo no me he podido resistir a contar mi relación con su obra. Escasa pero intensa. Aunque no me voy a poner pedante, como si fuese un falso estudioso de su legado, pienso que, una vez más, se nos van los mejores. 

viernes, 19 de febrero de 2016

La foto del viernes: El Algarrobico


En 2007 publiqué una entrada, titulada La cabra siempre tira al monte, donde comentaba la presencia de Javier Arenas en las listas de Almería (a pesar de no ser de allí). Esta provincia se ha convertido en un feudo del PP y casi todo está gobernado por ese partido. Eso se ha notado en el auge urbanístico, además del de la agricultura. Mostraba entonces un foto de la playa de Aguadulce, barrio de Roquetas de Mar, donde había pasado mis vacaciones. En la imagen se veía la construcción de un gran hotel aprovechando la ladera de un monte. Una burrada contra el espacio natural. Algo similar a lo que ha ocurrido en otras partes de Almería, como es el caso del hotel El Algarrobico, situado en una ladera del Parque Natural del Cabo de Gata. Tras 11 años de protestas ecologistas y conflicto judicial, con sentencias contradictorias del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, el Tribunal Supremo acaba de sentenciar que la construcción es ilegal, al situarse en terreno no urbanizable. Hay que demoler este desaguisado. Responsable no es solo el PP, con la reforma de la Lay de Costas y su desmesurado afán urbanístico en la zona, sino el PSOE, con la Junta de Andalucía favoreciendo la construcción, primero, y luego partidaria de demoler, y el ayuntamiento de Carboneras, que impulsó la construcción solo viendo los numerosos puestos de trabajo a crear. No todo vale, hay que respetar el medio ambiente. Y me alegro de la victoria de Greenpeace.

martes, 16 de febrero de 2016

Presentación de Pesadilla arqueológica


El viernes pasado asistí a la presentación en Palma del libro Pesadilla arqueológica, de Alejando Ibáñez, en la Oficina de Turismo, situada en la plaza mayor de Andalucía, en el restaurado edificio de la antigua alhóndiga. Alejando Ibáñez es el arqueólogo provincial de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía. Anteriormente fue profesor de la Universidad de Córdoba, en la Facultad de Filosofía y Letras. 


El acto lo presentó Óscar Morales, de la Editorial Séneca, editora del libro, que presentó al autor y los intervinientes, y luego nos obsequió con un aperitivo al finalizar.


Intervino Esperanza Caro de la Barrera, amiga y concejala de cultura en el actual mandato del ayuntamiento palmeño, que conoce a Ibáñez desde los tiempos en que era gerente de la Mancomunidad del Alto Guadalquivir, a la que pertenece Bujalance, municipio natal del autor, y comarca a donde se ha trasladado en múltiples ocasiones. Nos dijo que se había divertido mucho leyendo el libro, una novela sobre un descubrimiento de un tesoro, gracias a la intervención de una vidente, cuyas consecuencias relata. Y nos descubrió el placer por la gastronomía del arqueólogo, al que considera autor de la llamada gastroarqueología, saber donde se combinan el gusto por las diferentes manifestaciones de la alimentación y el estudio de su origen histórico, tanto a nivel teórico, como sobre todo práctico.


Hablo el alcalde palmeño, José Antonio Ruiz Almenara sobre la importancia de la recuperación del patrimonio histórico y su divulgación, así como del apoyo de los ayuntamientos a la cultura, en especial a la promoción de los libros.


Luego tocó turno al autor, que, con voz cascada por alguna afección propia del invierno, nos contó el origen de la novela, a la que no valdría aplicar esa frase que aparece en muchas películas ("todo parecido con la realidad es pura coincidencia") sino más bien lo contrario, pues nos  muestra una operación que vivió él en su pueblo y con gentes conocidas, aunque les cambie el nombre a todos, personajes y lugar, para no herir sensibilidades. Eso le sirvió para contarnos sus peripecias (sabores y sinsabores, incluidos) como funcionario dedicado a proteger el patrimonio histórico, de acuerdo con el mandato constitucional. Así nos relató su experiencia en el que iba a ser el aparcamiento subterráneo del bulevar del Gran Capitán en Córdoba, que sacó a la luz un importante yacimiento de varias épocas. También nos expresó su experiencia y opiniones sobre el yacimiento de Cercadillas. O nos contó su aversión a las reuniones políticas, como las de la Comisión de Patrimonio, que tanto le aburren, pues prefiere el trabajo de campo, que es donde se conoce la realidad de nuestro pasado histórico.

En fin, un ameno e interesante acto, donde pude comprar el libro, que espero sea tan divertido como nos lo reflejó Esperanza, y tan delicioso como el acto de presentación.

domingo, 14 de febrero de 2016

Carnaval de los ochenta, en el recuerdo


Era marzo de 1981, y en la revista Palma, la que editaba el ayuntamiento palmeño, José Felipe Cardenete se quejaba de que el carnaval tan admirable, del que le habían hablado en Palma del Río, ya no existía y el panorama era desolador en los dos años anteriores. Ese año, sin embargo, vio más movimiento en la calle, indicio de que o se estaba recuperando o tal vez era el canto del cisne que anunciaba su muerte. Por suerte fue anuncio de lo primero, pues en los años venideros el carnaval se convirtió en fiesta obligada de bullicio popular.


En los ochenta destacaban grupos y personajes que continuaron con su presencia en posteriores ediciones, convirtiéndose en señas de identidad de las carnestolendas palmeñas. Recordemos, por ejemplo, a la entrañable pareja que parodiaba a Tip y Coll, Francisco Rodríguez (Currito "el de los polos") y Manolín Almenara. Ellos eran fieles al carnaval, regalándonos sus letras críticas en verso, que leían con sencillo y simpático recitado, de esquina en esquina, no dejando títere con cabeza. Incluso se metieron conmigo, como era natural, por mi puesto en el ayuntamiento. La foto es de su paso en un programa de televisión de Canal Sur, publicada por Currito en su facebook, en el que participamos (yo fui entrevistado, disfrazado de avaro) numerosos paisanos y paisanas aficionados al carnaval. Un desgraciado accidente acabó con la vida de Manolín, truncando para siempre la trayectoria del dúo carnavalero.


También mantuvieron encendida la mecha la añorada Murga de los Niños de Villaloca. Un grupo de amigos, cuya composición fue variando con el tiempo, y al que se unían esporádicamente otros acompañantes deseosos de participar de su buen humor. Rafalito Carmona, Francisco Carmona, Antonio Gamero, Antonio L. Flores, Juan Luis Muñoz Nieto, Juan Delgado (Iríbar), Manolo Velasco eran de los iniciales. En algunas ocasiones, otros invitados: José Felipe, Manolín Fernández, Eugenio Valle, Rafa Limones, Leonardo, Olegario...


Participaron como presentadores en los famosos Concursos de carnaval en el cine San Miguel (años 90), como en el que parodiaron el descubrimiento de América, con Flores (Colón), F. Carmona (hermano Pinzón), Ramón Rosa (fraile), india nativa (A. Gamero) estatua de la libertad (J. L. Muñoz nieto). Una de las letras de su temas, donde se recogen los bares de la época, la mayoría desaparecidos, reza así:

Desde el Parque hasta el Paseo
vengo por la calle Feria
con la murga Villaloca
no tengo más que miseria
Vengo cantando y bailando
porque llegó el carnaval
y como buenos borrachos
pasamos de bar en bar.

Salgo desde el bar de Flores
paro en la cafetería
y me meto en lo de Guanche
a escuchar el parte del día
Me voy para el bar García
y aunque me cause un agobio
me voy a escuchar los chistes
de Manolo el de los novios.

En Las Palomas me llaman,
en El Latero también,
paro en el Lezna y en Peso
y más tarde en Rafael.
En el Rinconcito entré
Filarmónica después
y llego a lo de Romero
con la cabeza en los pies.

Ay, este vino
que bueno está,
que bien se toma
por carnaval.

Otra comentó el programa especial de televisión de la nochevieja de 1987, en el que salió la cantante italiana Sabrina:

La pasada nochevieja
hubo gran expectación
la gente estaba pendiente
de ver la televisión.

No era por las doce uvas
como ustedes se imaginan
“to” el mundo estaba esperando
los dos melones de la Sabrina.

Y cuando se puso a bailar
ay! que movimiento
una teta se le salió,
me cago en sus muertos.

Mucha gente no creía
que aquello fuera verdad
porque nunca habían visto
tetas en tal cantidad.

Y si lo que no le vimos
lo tiene de igual manera,
seguro que allí le cabe
un troncho como el de una palmera


Antonio L. Flores continúa su quehacer carnavalero en el grupo de teatro aficionado La Cochera de Flores, todavía en activo y siendo protagonistas de muchos espectáculos, no solo en Carnaval.


También el grupo Folk Azahares fue otro de los conjuntos asiduos durante años en nuestro carnaval, reuniendo con ellos a amigas y amigos.


Otros personajes populares de aquellos tiempos, algunos hoy en activo, son Jesús Morales, el del Pub Lord Byron, con su grupo de amigos, como los hermanos Gracia. O Manuel Carrillo, que acostumbraba a disfrazarse en solitario, hasta que el fallecimiento de su hijo Manuel Rafael, en accidente de tráfico, le apartó de estas lides. También se disfrazaban otros paisanos, como mascarones o, algo muy habitual, como mujer (mención especial para Carmelo Ruiz "el mono", ya retirado, o Antonio Muñoz Manzano, ya muy mayor y con familiares mayores a su cargo).


O Mariano Morales, que vemos con Ana Arquelladas, su mujer, disfrazada de Dama Blanca de Santa Clara y él de fraile, recitándonos sus poesías satíricas y burlescas.


Y también Eloy Viro, cuya presencia solitaria se ha convertido por muchos años en ingrediente fundamental del carnaval palmeño. 


Cuando existía Vientos del Pueblo, también participaba en el carnaval. Esta foto de Jose A. Martín Cuenca da prueba de ello, recogiendo la presencia de algunos miembros y amigos. Entre otros vemos al siempre añorado Rafa Ceballos, cuya estatura le hace destacar.


Y cierro este apresurado y entrañable recorrido por aquellos carnavales con una foto mía. En ella estoy disfrazado de espía, a las puertas del bloque donde vivía entonces, con más de 30 años menos, unos kilos más delgado y más pelo. Pudo ser en los carnavales de 1982 o 1983. Participé en un concurso de disfraces que hubo en el Club Juvenil, donde no gané nada, pero sí ganaron premio mi cuñado José Miguel y mi mujer, Ana. Me lo pasé en grande sorprendiendo a la gente mientras simulaba hacerles una foto con la cámara Hit, que comenté en otra entrada de hace años. Sabía que la foto existía, y hoy, por fin, hace prueba de que entonces yo también fui uno de los que intentaron relanzar el carnaval.

viernes, 12 de febrero de 2016

La foto del viernes: Rajoy le niega el saludo a Pedro Sánchez


Mariano Rajoy había dicho que iba a la reunión de hoy con Pedros Sánchez sin saber para qué y que le iba a tratar como se merece. Hoy lo hemos visto con una imagen que copa las redes y los medios. Cuando el secretario general del PSOE le iba a dar la mano, delante de los medios, Rajoy se ha puesto a abrocharse la chaqueta mirando para otro lado. Ahora lo entendemos. En el PP están enfadados porque Sánchez sea el encargado por el rey de presentar su candidatura a la investidura. Olvidan malévolamente que el principal candidato era Rajoy, pero dos veces ha declinado el encargo real que manda la Constitución. Y se enfadan. No tiene vergüenza, ni memoria, ni razón. Y Rajoy ha demostrado ser un pésimo político con este maleducado gesto, ya que no ha reconocido su desaire cuando se lo han preguntado. Él, que criticó a Zapatero (con razón) por no levantarse en aquel desfile cuando pasaba la enseña de Estados Unidos, ahora se pone faltón. Ay.

jueves, 11 de febrero de 2016

Nadie sabe nada, nada de nada


Esperanza Aguirre, tras el registro en la sede del PP por parte de la guardia civil: "Que a mí me conste, no ha habido financiación irregular en el PP de Madrid"


Rita Barberá"Después de 24 años de Gobierno en el Ayuntamiento de Valencia no se ha amañado ningún contrato, lo digo y lo repito, que yo sepa no se ha amañado ningún contrato ni ha habido ninguna mordida ni ninguna desviación para financiar ilegalmente nada"

Las todopoderosas lideresas del PP, que todo lo controlaban, que todo pasaba por sus manos, que nombraban y destituían cargos a cascoporro, no saben nada, no conocen a nadie, nada les consta... ahora. Ja. Nadie sabe nada. Ni Rajoy, claro. La mierda llega a alturas insospechadas en el PP. Veremos cómo acaba todo esto. ¿Alguien va a querer pactar con esta banda de indocumentados que hiede como las pocilgas?

martes, 9 de febrero de 2016

30 años de Radio Palma


En 1984 la Junta de Andalucía concedió licencia para una emisora de FM en Palma del Río. Un tiempo atrás, cuando sacaron la convocatoria, el Ayuntamiento palmeño solicitó una licencia para crear una radio municipal, y, al mismo tiempo, un grupo de jóvenes solicitó también la autorización, para una proyecto privado, siendo estos últimos los adjudicatarios finales. Pronto surgieron conversaciones para aunar esfuerzos en torno a la autorización concedida y llegaron al acuerdo de crear una sociedad para tal fin. El ayuntamiento se reservó el 45% de las acciones (a cambio de poner el local donde se instalaría la emisora), otro 45% se reservó el grupo adjudicatario (Manuel Muñoz Rojo y sus colaboradores) y un 10% fue suscrito por ciudadanos a título particular. Nacía así Radio Palma

Estudios de la Casa de la Cultura

El 9 de febrero de 1986 empezaron las emisiones en sus estudios de la Casa de la Cultura, contando con colaboradores como Manolín Fernández, Elisa Manzano o Mari Carmen Muñoz. Desde un primer momento la radio se orientó a la ciudad, su cultura, sus festejos, su música, el deporte y su actualidad, dando cabida a las entidades y asociaciones locales. Combinando el entretenimiento, la información y lo educativo. Sin olvidar otro tipo de contenidos más convencionales. Posteriormente se fue profesionalizando.

Balduíno Cano, Fermín Corredera y Manuel Muñoz Rojo

Yo participé como locutor en los primeros años en algún programa, como el que conducía Francisco Rodríguez Serrano, dedicado al Medio Ambiente, cuando fui delegado de ese ramo en la primera corporación palmeña en la que fui concejal (1983-1987). También el ayuntamiento patrocinaba otros espacios, como los dedicados a Juventud o Cultura (recuerdo el llamado "En camisa de once varas", presentado por Manolo Pérez). Como político también, lógicamente, tuve presencia en sus micrófonos desde un primer momento, destacando en 1986 uno de los debates que se retransmitieron desde sus estudios en plena campaña del referéndum sobre la OTAN.

A la izquierda, sin barba, junto a los parlamentarios, y a la derecha Eli Manzano moderando (Foto de E. Manzano)

O posteriormente, en un debate sobre las elecciones andaluzas, donde tuve que sustituir a última hora a Manuel Gracia (por una indisposición física repentina), representando al PSOE, junto con parlamentarios de otros partidos, organizado por Radio Palma, cuando era Dial Guadalquivir.

Rafa León cuando eran Dial Guadalquivir

Por sus micrófonos han pasado locutores como los mencionados Manolín Fernández, Elisa Manzano, Mª Carmen Muñoz, Fermín Corredera (que se hizo popular por su labor de difusión de la música pop y luego fue fichado por otras emisoras), Juan Braulio García, Rafael León (autor de la Historia del Fútbol Palmeño, ahora en América), J. F. Muñoz Prada (encargado de deportes), David Páez, Balduino Cano (publicista y locutor), Teodoro González (ayudante de retransmisiones deportivas), Maria José Martínez (ahora en Radio Córdoba), Maria Luisa López y Jesús Caro (actuales locutores), y Manuel Muñoz Rojo (propietario y director durante años). Además de otros y otras que no me puedo acordar.

María Luisa López, Jesús Caro y María José Martínez

Años después de su fundación la propiedad pasa a manos totalmente de Muñoz Rojo, al desvincularse el ayuntamiento palmeño, y sus estudios se trasladan a la calle Ancha. Incluso han tenido diversas etapas en contenidos, asociándose con la Cadena SER, en varios formatos radiofónicos (durante un tiempo fueron "Dial Guadalquivir", volviendo a anunciarse hasta estos tiempos como Radio Palma SER). Estando siempre presentes en la vida social, cultural y política palmeña, no solo como emisora, sino también como promotores de espectáculos y otras actividades culturales de interés. Siendo un medio de comunicación puntero de nuestra ciudad. Les felicito por los 30 años de existencia. Y les deseo, al menos, otros 30 años de vida más.

(Fotografías de la exposición celebrada por el 25 aniversario, en las salas de Santa Clara)

viernes, 5 de febrero de 2016

La foto del viernes: El Cordobés de fiesta, o ya no


Hace años se celebró un espectáculo taurino en Palma del Río, donde toreó Manuel Díaz "el Cordobés", a beneficio del Hospital de San Sebastián. Horas antes, el diestro se dirigió al edificio de esa residencia de ancianos, y, al salir del coche, una mujer dijo en voz alta: "es igualito que su padre". Se refería a Manuel Benítez "el Cordobés", del que se decía que era su progenitor con otra que no era su esposa. En estos días es noticia pues Manuel Díaz ha presentado una demanda de paternidad contra Manuel Benítez. Quiere que le reconozca como hijo. No sé qué resultado tendrá la demanda. No estaba presente cuando pudo realizarse el acto que pudo ocasionar la gestación y el nacimiento posterior. Ni tampoco conozco los pormenores del pleito (ni me interesan demasiado). De lo que sí estoy seguro es de que no le habrá hecho mucha gracia a nuestro paisano. Ya no se repiten las imágenes, como la que muestro en la foto, donde el "V califa del toreo" (con sombrero y bastón) departía amigablemente y de forma divertida con otros palmeños en un bar de la localidad hace bastantes años, cuando era la figura del toreo del momento, en presencia de su amigo "Charneca" (de cuyos familiares es la foto). Con los años, las visitas a los establecimientos hosteleros (muchas de ellas que daban que hablar) se han reducido. Y seguro que, con la demanda, el famoso torero de Palma del Río ya no está para muchas fiestas. Ya nos enteraremos del resultado. Lo mismo aquella vecina tenía razón. O no. 

jueves, 4 de febrero de 2016

Día mundial contra el cáncer


Ni un paso atrás, por favor. Ni por motivos económicos, ni por otras excusas. No debemos bajar la guardia. Que se enteren quienes nos gobiernan. Es de justicia.

miércoles, 3 de febrero de 2016

Concentraciones machistas

Imagen del anuncio de las manifestaciones

"Enseñando a los hombres a no violar, lo que se ha conseguido es que las mujeres no se cuiden de no ser violadas. (...) Tengo la solución: que la violación sea legal siempre que se materialice en una propiedad privada. Propongo que la toma violenta de una mujer no sea punible por ley si se realiza fuera de terrenos públicos". Palabras como éstas recoge en su blog Roosh Valizadeh, el impulsor de un movimiento de carácter machista que ha convocado concentraciones y manifestaciones el 6 de febrero por todo el mundo, para defender el pensamiento machista. Persiguen, por ejemplo, que las mujeres no puedan votar por su inferioridad intelectual y por carecer de sentido de la justicia. Una provocación en toda regla y una ataque a los derechos humanos, justificando incluso la violencia hacia las mujeres. Por eso hay una campaña para exigir que se prohíban esas manifestaciones que incitan al odio y la violencia contra las mujeres. Concretamente en Barcelona y Granada están convocadas concentraciones machistas en nuestro país. Yo he firmado para que las autoridades prohíban esas manifestaciones. Nuestra Constitución permite esa prohibición al existir "razones fundadas de alteración del orden público, con peligro para personas o bienes". No solo los ayuntamientos afectados, sin el Ministerio del Interior, tan interesado en prohibir otras manifestaciones contra la política de su gobierno, deberían poner medios para impedir que se celebren esos verdaderos atentados a los derechos humanos.

ACTUALIZACIÓN 4 DE FEBRERO: Las concentraciones han sido CANCELADAS por no poder garantizar la privacidad y la seguridad sus organizadores, según comunican. No habían comunicado la intención de realizar estas manifestaciones a las autoridades, así que podían ser prohibidas. No obstante, advierten que pude haber hombres que acudan por su cuenta, por lo que las fuerzas de seguridad deberán estar alerta.