domingo, 17 de junio de 2012

Sócrates como ejemplo del acoso a Grecia


Hoy Grecia ha convocado a sus ciudadanos por segunda vez a elecciones. Las anteriores no configuraron un mapa político que hiciese posible formar gobierno. Los partidos tradicionales siguen sin recibir el apoyo mayoritario, según las encuestas previas. Un partido de izquierda, SYRIZA, contrario a las condiciones impuestas por Europa y los mercados para el rescate (no de salir del euro, como dicen interesadamente algunos), puede ser ganador. Por ello llevamos semanas de presión a los griegos para que voten en el sentido de lo que dictan Merkel, la Comisión Europea y los dichosos mercados. Mensajes catatrofistas se difunden por doquier, alertando del "suicidio" de los griegos y del hundimiento de Europa, si ganan los "rebeldes".


Esto me ha recordado el caso de Sócrates, el filósofo, el maestro de Platón. Fue obligado a beber cicuta, como castigo por no respetar a los dioses (impiedad) y corromper a la juventud. Aceptó la condena a pesar de demostrar con un discurso plagado de ironías que no tenían razón, pero esto le granjeó más enemigos. Fue él el obligado al suicidio, como pena, hace 2.400 años, en una decisión democrática. A los griegos se les obliga ahora a suicidarse en honor a los dioses del mercado y el pensamiento único. Y se les amenaza con el apocalpsis si no votan según unos planes diseñados para que los países del sur queden al servicio de la gran Alemania y de las corporaciones empresariales que nos han arruinado, destrozando el sistema financiero del que se sirven sin moderación ni consideración ética alguna. Una vez más, el poder del pueblo, la democracia, mediatizada por los defensores de la tradición, en este caso de la de los mercados. En estos momentos los sondeos dan un empate entre el partido gobernante, Nueva Democracia (el partido que gobernaba cuando el hundimiento de la economía griega, que no pudo resolver el siguiente gabinete del PASOK, entre otras cosas, por la falta de apoyo derechista) y los izquierdistas de SYRIZA. Los salvaguardas de la ortodoxia liberal, empotrados en las instituciones europeas, estarán ya preparando el juicio por impiedad hacia los griegos, para obligarles a beber la cicuta del "corralito" o la salida del euro, con leoninas condiciones. Si no pueden formar gobierno los correligionarios de la mayoría "popular" europea, claro.

Será coincidencia, y bien curiosa. El primer ministro al que obligaron a dimitir y convocar elecciones en Portugal, otro país rescatado, se llamaba también Sócrates, José Sócrates. Hace un año comenté el hundimiento de estos países y las consecuencias de los cambios de gobierno. Será porque esto va camino de convertirse en un "clásico". Los griegos dieron el gran paso del pensamiento racional. El "logos" frente al "mito". Sócrates supuso una revolución en ese modelo de entender la vida. Los defensores del "mito", del pensamiento irracional, vencieron momentáneamente, pero la filosofía, la razón, avanzaría victoriosa hasta nuestros días, con los lógicos vaivenes. Los defensores del "mito del mercado todopoderoso" parecen hoy día los triunfadores, exigiendo ausencia de regulación y recortes en el estado del bienestar. Ojalá Grecia, una vez más, nos dé una lección, uniéndose a otros en la búsqueda de soluciones justas contra la crisis. De sus votos, como pasó también hace 2.400 años, depende.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Menos mal que ha ganado Nueva Democracia en Grecia porque si llegan a ganar los radicales de izquierda de Syriza hoy se hubiera producido una catástrofe. Y la prima sin enterarse.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Ni la prima, ni la hermana, ni la bolsa. ¡Todos a beber cicuta!