jueves, 2 de diciembre de 2010

Rodrigo Rato y la sonrisa

Hace algo más de un año escribí sobre lo que entiende el PP por despolitizar las cajas de ahorro españolas. Mientras Javier Arenas hablaba de sacar cargos públicos de los órganos de gobierno de estas entidades, Esperanza Aguirre intentaba colar a su "número dos" en Cajamadrid, aprovechando un desacuerdo de Zapatero para que Rodrigo Rato fuese el presidente, "veto" presidencial que todos sabemos que no cuajó. Hoy no solo el ex-ministro de economía con Aznar dirige la caja madrileña, sino que nos enteramos que ésta, al decidir sus representantes en el consejo de administración del nuevo banco que surgirá del SIP (sistema institucional de protección, conocido también por "fusión fría") junto a Bancaja y las cajas Insular de Canarias, Avila, Rioja, Segovia y Laietana, ha nombrado un buen grupo de políticos. Vamos, como para creerse a estas alturas de la película lo de la "despolitización"  que propone el PP (vamos, como para creer a estas alturas algo que venga de Javier Arenas, mejor dicho).


 Y esto viene que ni pintado para traer a colación otra "cosita" que vemos en los medios sobre el que también fuera vicepresidente con Aznar. Resulta que la revista Bloomberg va a dedicar en enero un demoledor artículo sobre Rodrigo Rato. Y se ha publicado ya un avance, en el que sus autores se preguntan ¿por qué sonríe el señor Rato?. Quienes han recogido la noticia afirman: Cinco páginas de popurrí, anticipo de la revista mensual del proveedor de información financiera que verá la luz en enero, en el que se mezclan la situación de ambas cajas, Terra Mítica, la política local, la biografía de Rato con un capítulo dedicado a su padre, pinceladas sobre su responsabilidad en la entrada de España en el euro y su “aburrimiento” en el Fondo Monetario Internacional. A las cajas que se refiere son Bancaja (una de las del SIP) y lógicamente, Cajamadrid. Y todo este compendio de asuntos son más que suficientes para que la imagen de "eficiente" de Rato se esfume sin remisión. Bueno, según este medio (no precisamente socialista), solo podría redimirse si le sale bien lo del SIP, y saca de los problemas a la caja que preside. 


La revista también refleja algo obvio. Rato, como ministro de economía, fue autor de las medidas que generaron el "boom inmobiliario", en realidad, la burbuja inmobiliaria que ha estallado con la crisis financiera internacional provocada en Estados Unidos. Así, ideas "geniales" como declarar urbanizable todo el territorio español (salvo zonas expresamente protegidas), recogidas en la ley del suelo que hizo el PP (y que declaró inconstitucional el Tribunal Constitucional), unidas al abaratamiento del crédito hipotecario, por la entrada de España en el euro (con una más que dudosa relación de cumplimiento de las condiciones dictadas entonces por Bruselas), hicieron que el dinero se moviera a espuertas sin respaldo real, además de ser un dinero siempre prestado por otros desde el exterior, que no ha hecho otra cosa que engordar un gigante con pies de barro, sin las reformas necesarias para garantizar la estabilidad de los negocios o el empleo generado, y endeudándonos hasta las cejas. Este último factor se vio agravado por  la admisión de nuevos socios en la Unión Europea, provenientes de los países del Este (Rumanía y Bulgaria), a los que se les impuso un periodo transitorio (con libertad de residencia y movimientos, pero con la prohibición de trabajar), generando en la práctica, gracias a la llegada masiva de inmigrantes, una ingente cantidad de mano de obra barata dispuesta a trabajar en la economía sumergida, que ha pasado posteriormente ha engrosar (y de qué manera) las listas de parados. Un panorama que ha agravado nuestra situación. Pues todo esto viene de la época en que Don Rodrigo Rato "hizo el milagro" (liberal por supuesto, como el de Irlanda) de "convertirnos en una potencia económica mundial"...pero del "ladrillazo". 

¿Y luego?. Don Rodrigo, como el Cid, siguió ganando batallas "después de muerto". Y así, tras la derrota electoral del PP en 2004, fue nombrado Director Gerente del Fondo Monetario Internacional, el organismo mundial encargado de "la promoción de políticas cambiarias sostenibles a nivel internacional, facilitar el comercio internacional y reducir la pobreza".  Menudo sarcasmo. Bloomberg nos dice que Rato en 2007 se fue por "aburrimiento". No me extraña, su mandato coincide también con el climax de la globalización y liberalización financiera internacional. Es decir, con la supresión de regulación y controles de los movimientos de capitales. Con sus postulados ideológicos se había quedado sin nada que hacer para cumplir los "presuntos" objetivos del FMI. Vamos, que, si nos fijamos bien en las fechas de inicio y cese en el cargo (2004-2007), vemos claramente la mano de Don Rodrigo, con su pasividad (por motivos ideológicos) en el desastre financiero internacional que estalló en 2007 (¿casualidad?) y cuyos efectos estamos sufriendo. 

En otras cosas personales que cita la revista no voy a entrar. Con esto es suficiente. ¿A alguien le puede sorprender el ataque frontal de este medio especializado en economía, tan prestigioso a nivel internacional, con un bagaje como éste?. A los dogmáticos neo-cons, a los ultra-liberales y demás propagandistas del capitalismo salvaje en boga actualmente sí les podrá extrañar. Pero a alguien que conozca la historia económica de nuestro país y quiera ver las causas de los problemas que padecemos, seguro que no le sorprenderá. Solo hace falta hacer un poco de memoria. No estamos tan lejos de las causas del desastre. Y de ellas, por este proceder, sabe mucho también el señor Rato. Ya lo dice el refrán: unos crían la fama y otros cardan la lana. Pues...¡Dejémonos ya de mitos!

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