jueves, 14 de mayo de 2009

Silencios, obispos, preservativos, suicidios...

El arzobispo de Granada cree que "se silencia" que el uso "masivo" de preservativos ha propagado el SIDA en África

GRANADA, 14 May. - El arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez, cree que "se silencia" que el uso "masivo" de preservativos no ha detenido el sida en África, sino que "lo ha propagado", según publica en un artículo, con el título '¡Gracias, Santo Padre!', dado hoy a conocer por Odisur.

"Y se silencia el número de suicidios que se producen entre las mujeres que han abortado. Y se silencia la amargura infinita y el dolor en que viven la inmensa mayoría de las que se han creído que eso era un derecho, y no saben que sería mucho mejor que fuese un pecado, porque los pecados, todos los pecados (...) Y se silencia que, según estadísticas oficiales, en Andalucía, la primera causa de muerte entre los adolescentes y jóvenes no son los accidentes de tráfico, sino el suicidio. Y como se silencia, nadie se pregunta por qué. No hace falta preguntarse, porque es obvio que vivimos en el País de las maravillas", mantiene.

Ya comenté las declaraciones del Papa y el SIDA en África en otro artículo reciente. No voy a insistir sobre ello, pues la tozudez en el infundio, aunque lo propague un seguidor, no es prueba de veracidad que mitigue o anule el embuste, o el sarcasmo. Este señor, ascendido por el método de “la patada en el culo hacia arriba”, que pasó de obispo de Córdoba a arzobispo de Granada, tras enfrentarse al Marcinkus español, el banquero de Dios en Córdoba-CajaSur, el otrora todopoderoso presidente Miguel Castillejo (que consiguió expulsarlo de la tierra de los califas, tras visitar personalmente el Vaticano), se hizo famoso por sus salidas de tono generalizadas, llegando a ser condenado por coacciones e injurias a otro sacerdote (posteriormente absuelto por prescripción). Hoy se sale del tablero de juego otra vez con estas declaraciones absolutamente tendenciosas. O si no, pregúntense si no es tendencioso inquirir:

¿Por qué se silencia el número de los suicidios de los bautizados católicos, en comparación con los que no lo son?

¿Por qué se silencia el número de los suicidios de quienes se han casado por el rito católico?

¿Por qué se silencia el número de los suicidios de los monaguillos sodomizados en las sacristías por sacerdotes cristianos?

¿Por qué se silencia el número de los suicidios de las mujeres que no pueden divorciarse de sus maridos maltratadores en los países confesionalmente católicos, como Polonia, donde no existe el divorcio?

¿Por qué se silencia el número de los suicidios de los alumnos de centros docentes, sean o no concertados, de la Iglesia católica, cuando son castigados de forma degradante y amenazados con las hogueras del infierno?

¿Por qué se silencia el número de los suicidios de los africanos contagiados de sida, tras hacer caso a los sacerdotes católicos y no usar el condón?

Señor arzobispo, su iglesia silencia tantas, tantas cosas…..

2 comentarios:

Aprendiz de Mucho dijo...

Se me pone tan mala leche que entiendo, repito, entiendo aunque no justifico el odio y la venganza de la "Hordas rojas" en el36.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Eso es lo que esperan y quieren ellos, odio. De esa forma se les convierte en mártires. No debemos caer en provocaciones. Van a perder su "guerra", aunque se resistan.