martes, 24 de febrero de 2009

La dimisión de Bermejo y la NO-dimisión de Federico Trillo

Tras la dimisión (lógica y necesaria, a la luz de las circunstancias) del ministro de justicia, Mariano Fernández Bermejo, que había sido pedida con insistencia por el portavoz de justicia del PP, hay que hacerle un recordatorio:

Hace 5 años y nueve meses 62 militares españoles murieron en un accidene del avión, el tristemente famoso Yak 42, en que regresaban de Afganistán. Los cadáveres fueron entregados a sus parientes mal identificados…..Y el ministro de defensa, responsable político de estas 62 muertes y del engaño posterior, Federico Trillo, sigue sin dimitir.

Y tiene la cara tan dura como para pedir la dimisión a Bermejo por una cacería de ciervos y jabalíes. Ya sabemos la importancia que tiene para este supernumerario del Opus Dei la vida de esos 62 seres humanos, menos que las de las piezas cazadas en la montería organizada por un alto cargo del PP de Jaén.

Y Mariano Rajoy le respalda, aunque las familias de esos 62 muertos le exijan que asuma su responsabilidad.

Y los máximos responsables políticos e implicados en las tramas de espionaje y de corrupción del PP, a esta hora de la mañana del día siguiente a la dimisión de Bermejo, siguen sin dimitir… Y Rajoy les respalda

Sin complejos….sin vergüenza.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

La re-aparición de Trillo es espeluznante. Y la cara dura de Rajoy defendiéndole esta mañana es de Guinness. ¿Qué tendrán que ver los tribunales con Trillo y el Yak 42? Con Fabra SI. Pero con Trillo es responsabilidad política lo que se deriva de su nefasta actuación, como Ministro y gestor de la crisis del Yak. Me callo porque me enciendo...

Anónimo dijo...

Aclaro: Fabra no tiene nada que ver con el Yak pero si con los tribunales.

Aprendiz de Mucho dijo...

¿Pero ques epuede esperar de un minis-trillo de paco-tilla?... Pues eso, que tenga la cara mas dura que el acero de Bilbao. Eso, si, el verbo dimitir no lo debian enseñar en los colegios de pago.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Esa es la cuestión para las dimisiones. Se trata de responsabilidad política, no judicial. Por eso ha hecho bien Bermejo en dimitir. Su presencia en el gobierno se había convertido en un escándalo político, perjudicial para ZP.

Lo de Trillo no tiene nombre, es de una desvergüenza mayúscula. Él sí tiene responsabilidad política. Pero, como dijo alguien, cuando Rajoy pidió en el congreso a Zp la destitución de Bermejo porque se equiparaba a él, el echar balones fuera hoy Rajoy, con todo lo que está pasando en su partido y el diferir la exigencia de dimisión a las sentencias judiciales, le pone en la misma situación que estaba Zp al no destituir al ministro de justicia dimitido, que él expresó desde su escaño. Lo de Fabra aumenta su desvergüenza, la de Rajoy, claro.

Francisco Javier Domínguez Peso dijo...

Aprendiz, en los colegios de pago el verbo dimitir no se conjuga nunca en primera persona, ¡y dicen que esa es la enseñanza de calidad! ¡farsantes!